martes, 2 de marzo de 2010

Uno de Bukowskii

Para Jane, con todo el amor que le tuve, que no fue suficiente




Recojo la falda,

recojo el rosario negro

que brilla,

eso que una vez

tocó su carne,

y llamo mentiroso a Dios

y afirmo que algo que se moviera

así

o que supiera mi nombre

no podía morir nunca

con esa certeza inamovible de la muerte.

y recojo su precioso vestido,

perdida toda su belleza,

y les hablo

a todos los dioses,

dioses judíos, dioses cristianos,

pedacitos de cosas brillantes,

ídolos, píldoras, pan,

comprensiones, riesgos,

renuncias conscientes,

ratas en la salsa de 2

que se han vuelto casi locos,

sin ninguna oportunidad,

conocimiento de colibrí,

oportunidad de colibrí,

me inclino sobre eso,

me apoyo en todo eso

y lo sé:

tengo su vestido en mi brazo

pero

nada

me la devolverá.