IMAGINA por
un momento que esta historia sucede en Madein. Imagina por un momento que estás
recorriendo sus calles abarrotadas en las noches, que te tropiezas con
borrachos y compradores de última hora; imagina que alzas la vista al cielo y
crees ver, por un momento, por un solo magnífico momento puesto que eres aquí
un forastero, un inmigrante, no un habitante de esta ciudad, que los mismísimos
ángeles de la creación acompañan a Madein. Justo en ese momento, quizás un
hombre de negro, vestido completamente de negro, de tal manera que se puede
confundir entre las sombras, te tumbe solo porque te has interpuesto en su
camino o no le has permitido apuntar bien con su ballesta. Es importante que tengas en cuenta que no es
personal, que ellos solo tienen ojos para su presa.
Es
importante que pienses en Madein, no en Kalí o en Suamox, porque la historia de
los Cazadores comenzó en Madein, poco después del surgimiento de los gifty. A
decir verdad, muy poco después. Solo puedo decirte esto por ahora:
Entre todos
los cazadores, hubo un fiero guerrero llamado Skin. Eran otros tiempos, eran
otras épocas. No necesitaré justificar sus acciones porque él hizo lo que tuvo
qué hacer, al igual que yo ahora. Hubo un fiero guerrero llamado Skin, y tenía
un mejor amigo llamado Atón.
0 comentarios:
Publicar un comentario