domingo, 31 de octubre de 2021

FIN

 


FIN

Existe el deseo recurrente de morir haciendo lo que amas. Se dice que es un final poético, que es un final hermoso. En contra de la opinión popular, no lo creo. Sin embargo, él, Samuel, lo creía.

Samuel amaba escribir como otras personas aman el queso o a Dios. Constantemente sus ideas se traducían en palabras y estas en novelas que se convertían inmediatamente en éxitos superventas. Incluso se decía que no tenía una vida, sino que la había narrado; que se había creado para sí los personajes de una esposa encantadora y de dos hijos adorables. Los demás no sabían el infierno que era vivir con él.

Durante el último año, Samuel entró en un frenesí desconocido incluso para él. Comenzó a escribir una saga de siete volúmenes donde sucedía absolutamente de todo. Sin embargo, cosa a todas luces ajena a él, el final mismo le era elusivo a pesar de que día y noche solo estaba pensando en él. Así sucedió que la vieja Huesos le encontró una mañana y se le llevó con él mientras trabajaba en las últimas páginas de su novela. Jamás a la vieja Huesos le había pasado algo similar. Samuel se resistió. De nada valió la conversación. De nada valieron las amenazas. En un punto de giro impensable, la vieja Huesos se cansó y dejó ahí a Samuel, quien aún sigue rondando las ruinas de su propia casa, su enmohecida maquina de escribir, buscando a través de los siglos el final perfecto para su saga de novelas.

Dicen que el número de sus lectores aumenta mientras espera con él.                        

LA ÚLTIMA II

 



LA ÚLTIMA

II

 

     Si Se siguen los procedimientos estándar de indagación se puede llegar a encontrar testimonios como los del oficial Ramírez quien afirma que fueron 43 los cuerpos enviados a la morgue. El testimonio de Ramírez ha sido el mismo a lo largo de los años, y su historial no nos permite dudar de él. Sin embargo, en la minuta de la morgue, correspondiente a esa misma noche, se puede leer que llegaron 42 cuerpos.

     De todo esto lo que se puede deducir es que, en alguna parte, a lo largo de los 112 kilómetros que separan el lugar del encuentro final entre Los Hijos del Neón y la policía de la morgue, el cuerpo de Narya desapareció. La otra hipótesis que se maneja es que la misma Narya haya desaparecido. Si así fue, de seguro estaba mal herida. Si así fue, de seguro necesitaba ayuda.

 

***

     Si has ido alguna vez a Kalí, habrás tenido que atravesar el desierto que la rodea. Un erial que es conquistado de cuando en vez por las Zonas de Violencia Controlada más aguerridas y necesitadas, que también suelen ser las más viejas. A punta de esfuerzo, terquedad, algo de buena suerte, mucho pirateo informático y saqueos, los dirigentes de estos espacios han podido hacer florecer al desierto al que se han visto empujados. Esto ha significado para ellos, sobre todo, más espacio para el cultivo. Al contrario de lo que se piensa, los habitantes de las ZVC suelen ser bastante hospitalarios, aunque claro, eso depende de qué lugar de la cadena alimenticia ocupes, pero ten la seguridad de que si has caído en desgracia y te ves empujado al exilio o necesitas ayuda, estar en una ZVC puede ser una ventaja.

     Si lo que he averiguado es verdad, y plugo porque así lo sea, Narya está viva, estaba embarazada y, si las cosas nos han salido bien a todos, el hijo de Atón está con ella. De ser así, el pueblo de Kalí tendría no solo una sino dos fuentes de luz resplandecientes que le darían una oportunidad frente a la oscuridad del mundo.

     Puedo decir aquí, sin temor a las consecuencias, que Narya fue subida viva al camión que habría de llevarla a la Morgue. Tenía dos o tres heridas superficiales, pero estaba en shock por haber visto como caía Atón a su lado; por escuchar como Atón saludaba a antiguos héroes de la historia o legendarios. En algún momento llegó a escuchar el piafar de los caballos y voces en idiomas extraños. Lo único que Narya pudo entender fue que aquel que creía inmortal había muerto en una última arremetida contra el orden, porque, por supuesto, no podía ser de otra forma, para el mundo que habitaban, Los Hijos del Neón solo podían ser representantes del caos.

     Ramírez fue quién la ayudó…                                     

domingo, 24 de octubre de 2021

LA GALLINA

 


LA GALLINA

A Clarice Lispector

Esta era una gallina calendario. Es decir, era una gallina de madera cuya función decorativa era complementada por la posibilidad de servir de referente temporal para quien habitaba. Es claro que esta última idea era solo una posibilidad, pues la gallina no tenía un mecanismo automático para cumplir su función, de manera tal que dependía de una fuerza externa para que la cumpliera. A la gallina calendario todo le era indiferente, por supuesto, pues no era una criatura viva, y aquello que no está vivo no está atado a las pasiones o a las emociones.

     Un día, pues todo ha de suceder algún día, una niña vino a sumar al trajín del hogar toda una serie de experiencias nuevas. Así, el hogar antes silencioso, se vio poblado por gritos, llantos, gorjeos, risas y carreras. A lo largo de unos pocos años todo un nuevo ciclo de situaciones se sumaron a las antiguas rutinas. Por supuesto, la gallina calendario observaba todo desde su lugar en el poyo de la cocina de manera impertérrita. Aunque, en ocasiones, le hubiera gustado poder sonreír ante la dulzura y la inocencia de la niña. Si hubiera cabido en ella la sorpresa, se habría sorprendido.

     Sobra decir que la forma en que la gallina cumplía su función de calendario era a través de piezas de madera pequeñas. Sobra decir que los niños pequeños todo lo exploran y todo lo conocen a través de la boca. Sobra decir la desesperación, el llanto, la angustia, el dolor, y después el silencio. Un silencio de mortaja, un silencio de muerte.

     La gallina, desprovista de su función, agotada sus posibilidades sintió el peso de la culpa, y de haber podido llorar lo habría hecho. En contraste sintió justo el silencio que sobre ella recaía, y su posterior abandono hasta que fue estiércol, polvo, nada.                                             

sábado, 23 de octubre de 2021

LA ÚLTIMA I

 

LA ÚLTIMA

I

 

     Al día de hoy las discusiones siguen presentándose. Nadie anticipó la existencia de Los Hijos del Neón, y nadie se explica cómo no se prendió la chispa de la revolución después del mítico enfrentamiento final que terminó con la vida de Atón y con la de casi todos los miembros de su tribu urbana. Lo que es cierto es que Narya no fue hallada, aunque todos los testimonios indicaron que se encontraba junto a Atón en el enfrentamiento. Los que no cayeron abatidos fueron olvidados en cárceles y seguir la pista de sus movimientos a través de todos los procesos burocráticos es una labor casi sobrehumana. Sin embargo, después de atravesar todo el dédalo de funcionarios y jueces y folios, los testimonios son idénticos: Narya estaba con ellos. La oyeron gritar en el campo de batalla, la vieron mostrar sus dientes con furia y atravesar con sus cuchillos de pedernal los cueros de sus enemigos. Mientras cuentan eso, los ojos de los antiguos rebeldes se animan y se puede entender porque el gobierno les teme, porque intenta perder la llave de sus celdas.

     Poco se sabe de Narya, aunque se sabe más de ella que de Atón. Hizo parte de la tercera generación de nacidos en la ZV58a3 y, al igual que muchos de los jóvenes antes y después que ella, lo único que podía hacer era sobrevivir, forjando alianzas, sirviendo en las pandillas para participar de la rapiña; ofreciendo pronto su cuerpo. Al menos hasta que conoció a Atón.

     Los rumores dicen que Narya fue el único amor de Atón. Si se puede llamar amor a la relación que ellos tenían. Dicen, además, que Skin intentó separarlos en muchas ocasiones, no por deseo a ella, sino porque le robaba la fidelidad de su segundo al mando. Lo que no sabía Skin es que Atón solo se pertenecía a sí mismo, y solo seguía su propio camino.                                     

domingo, 17 de octubre de 2021

EL VESTIDO

 


EL VESTIDO

Salió a bailar con su vestido azul con flores amarillas. Su madre se lo había regalado hacía mucho tiempo. Las flores amarillas destacaban en el ruedo como diminutas estrellas en la noche y siempre había alguien que se detenía para alabárselo.

     Salió a bailar con el grupo a uno de esos sitios que siempre están de moda en Kalí, y en donde más de una vez se ha dicho que el diablo se apareció.  

     El diablo se apareció. Llevaba una barba poblada y la mirada sesgada. Vestía camisa blanca, jeanes ajustados y la certeza de tener siempre la razón. Él y sus amigos se prendaron de su vestido. Le rodearon. A empujones lo sacaron de la discoteca y lo llevaron a un callejón. Ahí le gritaron cosas que no entendió porque estaba asustado. Alguien le golpeó de tal forma en el rostro que casi perdió el sentido. Alguien le desgarró el vestido y la ropa interior. Luego no sintió nada más. Ni siquiera los navajazos que le cosieron todo el cuerpo.

     Sus amigos lo reconocieron por las flores amarillas que aún brillaban sobre el campo de sangre en que fue convertido su vestido.  

                           

                                 Andor Graut

 

sábado, 16 de octubre de 2021

LA ÚLTIMA

 


-          ¿Sabes que siempre visten de negro?

El mundo cambia,

-          Pelean con espadas en la noche.

 se retuerce.

-          Defienden a los Gifty.

El mundo no está conforme. El sueño se defiende. Con cierta lentitud el mundo va cambiando. Los problemas relacionados con las naciones se ven sustituidos por el enigma de los Gifty, y, ahora por las figuras que se enfrentan en las calles a espadazos. Ya Los Hijos del Neón habían contemplado un retroceso, pero no se esperaba que fuera a tal magnitud. Muchas naciones han cerrado sus fronteras, y las Zonas de Violencia Controlada se han revelado ineficaces, aunque los gobiernos se empeñen en multiplicarlas. Nadie parece fijarse en lo importante.  

En la ONU, las discusiones apuntan a la responsabilidad del origen de los Gifty. Solo hay una cosa cierta: salieron de Taz-Nel, y Taz-Nel es una pequeña tierra de nadie en disputa por decenas de grupúsculos armados en medio de la selva, y en este momento cualquier pedazo de selva es preciado. En ese sentido, cualquier intervención sobre Taz-Nel es considerada un acto de guerra, aunque las naciones tiendan hacia ella sus redes de espionaje. Lo ignoran todo, sin embargo. Ni los Gifty, ni los cazadores, ni los guardianes reconocen frontera alguna.

Esta es una historia de supervivencia. Esta es una historia que ocurrido antes de la Dama de Madein, antes del Faro de Kalí. Esta es la historia de Narya, la última Hija del Neón.

 

                                   Andor Graut

domingo, 10 de octubre de 2021

FAR

 


FARO

La rutina en el faro es siempre la misma. Te despiertas a la misma hora, temprano en la mañana y revisas la maquinaria, aprietas las tuercas y evitas mirar el fin del mundo. Hay cosas que se mueven allá a lo lejos y quienes logran ver más que una membrana, un ojo o un tentáculo, suelen perder la cordura. Por eso, los fareros somos una especie en vías de extinción.

     El faro tiene una doble función. Mantiene a raya los monstruos y avisa a los navegantes que están cerca del borde de la tierra. Por esa razón, es un trabajo que exige una entrega constante y una disciplina a toda prueba. La vida del farero solo es una: el faro. El amor del farero solo es uno: el faro. La existencia del farero solo tiene un objetivo: el faro. Si cae el faro, la existencia misma llegará a su fin.

     A veces llegan noticias del continente, donde el pecado y la depravación campean a sus anchas. Donde quienes lo desean no pueden morir y los niños secuestrados son asesinados en nombre de una guerra bastarda. Donde extrañas criaturas frecuentan los cielos. Entonces recuerdas: El viejo faro no existe. Fue derruido doscientos años ha.