lunes, 4 de abril de 2022

ZORRA

 


ZORRA

     No sabía la zorra cuantos inviernos había pasado sola. Había pensado que estaba bien así hasta que cerca a su cubil una mañana apareció una ardilla. Le gustaba verla en la mañana antes de salir a cazar y le gustaba verla en la tarde leer un libro antes de ir a dormir. Por supuesto, es de todos sabido que las ardillas no son animales solitarios, así que a la zorra no le sorprendió ver que una tarde la ardilla ya no estaba sola. Primero llegó otra ardilla y luego pequeñas ardillas que alborotaban por doquier. Todo ello satisfizo a la zorra.

     Entonces llegaron los perros. Aunque no se cobraron víctimas la familia se dispersó. De forma ocasional la zorra reconocía a algunos de los pequeños a partir de los rastros que dejaban. Algunas veces se sorprendía preguntándose que sería de ellos mientras desgarraba la pata de una paloma que había cazado aquella tarde.

     La zorra envejeció y una tarde murió. Nadie supo de la muerte de la zorra, a lo sumo una ardilla que pasaba por ahí y que nunca supo que la muerte siempre estuvo atenta a ella desde su cubil.

AXZNEL XII

 



AXZNEL XII

     Hubo un momento en que enloquecí. Hubo un momento en que supe que algo había retorcido las leyes de la realidad como yo las concebía; comprendí por fin hasta que punto todo era fútil y deleznable; comprendí a Axznel. Todo eso sucedió en algún momento entre mi visión de una y otra ventana, entre ver a los perros dimensionales y lo que habían lanzado al otro lado, que era, por supuesto el Hijo de Nut. Tomé El Tarmadón mientras urdí un hechizo de ocultamiento para poder salir de la casa.

     Detrás de mí la jauría se lanzó contra Axznel en tanto este se alzaba hacia el cielo. No me quedé a ver lo que sucedía. Me preocupaban mis hermanos, mis amigos, mis conocidos de toda la vida, pero, no temo decirlo, me preocupaba mi vida. Me lancé hacia el lado donde el caos no estaba sucediendo, y al parecer no fui al único al que se le ocurrió; pronto detrás y a mi lado se comenzó a congregar una pequeña multitud que buscaba ocultarse en el corazón del bosque. Si en ese momento un oso hubiese osado cruzarse en nuestro camino, simplemente lo hubiésemos avasallado.

     No puedo saber cuánto tiempo corrimos ni escapamos. Sé que llegué entre otros tantos y que detrás nuestro se elevaba una humareda espesa. Sé que sobre los árboles comenzamos a escuchar gorjeos graves, lo que nos obligó a subir las vista para encontrarnos con un pequeño pelotón de giftys.

     En otro momento la vista me habría alegrado, pero hubo un tiempo en que nuestro pueblo había sido guarida de cazadores, y no creo que las cicatrices hubieran sanado nuestra relación con los gifty. Los vi altos, exóticos, exuberantes y, cuando la lanza se clavó ante mis pies, hostiles.

     Habíamos salido de la sartén para caer en el suelo.

sábado, 26 de marzo de 2022

AXZNEL XI

 



No confíes nunca en quien se refiera a sí mismo como mago. Es la mejor manera de saber que es un farsante. El verdadero mago trabaja en las sombras, busca reducirse a ser nadie, nada. Yo era un mago, los hermanos me reconocían como tal, pero no había entendido nada. Tuve conmigo uno de los objetos más poderosos de mi realidad, aquel que tenía la formula precisa -en alguna parte, si hubiese sido paciente, si hubiese sido eficaz- para derrotar a Axznel y al mismísimo Eyanael, para haber impuesto mi realidad sobre la suya, y ni siquiera había sabido reconocerlo.  Yo solo había visto una curiosidad de feria en un objeto de poder. Por primera vez reconocí mi arrogancia y traicioné todo lo que creía al saberme ignorante; quedé de entregarle El Tarmadón a Axznel la noche siguiente. Fue entonces también cuando hice mi promesa de retirarme lejos de lo que conocía.

A la mañana siguiente comencé a ordenar lo que llamaba hogar. Hablé con algunos hermanos y mencioné que pronto saldría en un viaje. Ordené algunos libros en una mochila, aparté El Tarmadón, que reverberaba con luz propia, sobre la mesa, y dispuse de lo mínimo que necesitaría para sobrevivir. La cabeza siempre abajo reconociendo mi ignorancia y humillación.

Comenzaba a barrer mi estudio cuando algo rompió la ventana y después la pared del otro lado del cuarto. No pude ver nada mientras me tiraba al suelo protegiéndome la cabeza. Cuando me levanté pude ver, a través de lo que quedaba de mi ventana, perros dimensionales que se acercaban desde el bosque. No podía parpadear. Se suponía que los perros dimensionales eran criaturas míticas de las que se habían avistado uno o dos a través de los milenios y en condiciones extrañas. Lo que tenía ante mis ojos era una jauría completa a la luz de la mañana.

domingo, 13 de marzo de 2022

ESPERA

 


ESPERA

Las columnas de cemento rasgaron la tierra. Surgieron como dedos putrefactos que luego albergaron muros entre ellas, y se permitieron ventanas y espacios para ser habitados por seres humanos o cosas que se le parecieran.

El capitán Gómez vio con satisfacción como con rapidez surgía toda una ciudad que pronto sería poblada, si más como él lograban huir de casa. Pronto hubo un bar y también una iglesia, y una biblioteca, y una tienda de víveres que ya se estaban cultivando en las granjas automáticas.

Pronto sería la hora. El capitán Gómez había apostado que él y su tripulación no podían ser los únicos, que más podrían sumar dos y dos y escapara a tiempo.

La tripulación colocó los carteles de bienvenida y el doctor Bradbury y algunos técnicos ensayaban con extraños instrumentos una especie de bienvenida.

Cuando la Tierra estalló a lo lejos se quedaron expectantes, pero nunca nadie llegó al pueblo. Recogieron sus bártulos, se miraron a los ojos y se dedicaron a la tarea de poblar ese nuevo planeta con una humanidad a la altura de un nuevo sueño.  

AXZNEL X

 


AXZNEL X

     No supe cuando se movió. En un momento estuvo ahí y un momento después de estuvo. No fue un gran movimiento, solo un desplazamiento de centímetros, lo suficiente para no tocarlo. Me miró entonces como si lo hiciera por primera vez.

-          Tienes algo que me interesa -, repitió.

     Recordé lo sucedido con Jason y su grupo. O mejor, recordé no saber lo sucedido con ellos y sentí un escalofrío.

-          No sé de qué hablas -, le respondí, y era sincero, lo último que tenía en mi cabeza en ese momento era El Tarmadón.

-          Un libro -, dijo entonces. Entonces entendí y no lo hice al mismo tiempo. Entendí qué libro podía buscar, pero no la razón por la que lo pedía cuando simplemente podía haberlo exigido. Tampoco entendía porque me pedía un libro que, según sabía cualquiera podía tener de manera sencilla.

     No le respondí de inmediato, simplemente me quedé mirándolo mientras pensaba un montón de cosas, entre ellas cómo escapar o que hechizo usar contra él. Decidí hacer ambas cosas. Recité un hechizo sencillo de ocultación que nublaría sus sentidos mientras intentaba poner la mayor distancia posible entre nosotros.

     No pude hacer ninguna de las dos cosas. O mejor sí, lancé el hechizo, pero no tuvo efecto sobre él, de manera que en cuanto intenté moverme me dí de lleno contra él, quien de nuevo había vuelto a desplazarse en un visto y no visto.

 

     Solo me miró. Entonces me explicó que lo necesitaba, que lo que yo tenía era el arquetipo de El Tarmadón, no una de sus sombras proyectadas, sino un fragmento de la realidad, y mientras él más explicaba yo menos entendía, porque se suponía que era el enemigo, pero me hablaba ahora de dimensiones y esferas y formas de realidad y sombras, cosas que había atisbado a medias entre las líneas de algunos de mis viejos grimorios.            

domingo, 6 de marzo de 2022

VOZ

 


VOZ

            En su oscura casa de piedra las tejedoras realizaban su oficio. Átropos preparaba sus tijeras…

Las voces en su mente le torturaban de noche y de día sin darle paz ni descanso. Habían comenzado con cosas sencillas, diciéndole que no era suficientemente bueno o capaz, para luego ir progresando y dejarlo, de forma literal, al borde del abismo. Las voces ya no razonaban, ya no se contradecían, ahora eran una sola palabra que se sentía como un zumbido de fondo: Hazlo.

     Sentía el viento contra su cuerpo y era consciente de la multitud que comenzaba a formarse abajo, en la entrada del edificio. Sentía el palpitar de la sangre en las sienes, sentía la llamada del abismo, podía acariciar la libertad. La voz rugía furiosa: Hazlo.

     La vida pasaba frente a sus ojos. Las veces que había sacado malas notas, cuando quebró el jarrón preferido de su abuela; cuando uno de sus compañeros – amigo no, él no había sabido nunca lo que era un amigo- se había cuadrado con la niña que le gustaba; cuando perdió el año dos veces; cuando comenzó la bebida y su mujer lo había dejado; el rostro de decepción de su hijo. La voz era cada vez más imperiosa: Hazlo.

     Recordó cada vergüenza, cada sufrimiento, cada decepción, cada sinsabor. Apretó los dientes. Alzó uno de sus pies sobre el vacío. Alguien gritó allá abajo a sus pies. No la voz en su cabeza, si no una voz ajena, desconocida, una voz impresionada, llena de terror. Otros recuerdos acudieron a su mente. Había un castillo en esos recuerdos y un corcel blanco y un mago poderoso; un par de rostros infantiles mirándolo con adoración; una mañana fría de octubre; una lluvia pertinaz donde un perro corría a su lado. La voz arremetió de nuevo: Hazlo.

     Contuvo la respiración. Los segundos duraron horas. Devolvió el pie a su anterior posición. Desistió. Fracasado, incapaz, inútil, se alzó la voz todopoderosa y brutal. Un policía al fin había logrado abrir la puerta y se lanzó hacía él.

     Necesito ayuda, alcanzó a musitar antes de que las voces se adueñaran de nuevo de su cabeza.

     Átropos sonrió amarga, Laquesis continuó con su tejido…

                                      Andor Graut

 

      

       

AXZNEL IX

 

 

AXZNEL IX

     Axznel no llegó directamente a mí. Alguien vino en su nombre. Llegó con un pedido, una citación, una muestra de respeto. Por supuesto, se me pedía salir del área urbana, ir solo. No se dijo nada de armas.

     Confieso que me pudo la curiosidad. Salí en mitad de la noche sin que nadie supiera dónde. A mi esposa le dije que salía a algo con los muchachos, a los hermanos, que haría algo con mi esposa. Era una noche fría, de esas que invitan a los lobos a los pueblos. Me arrebujé lo mejor que pude en mi abrigo y llegué al bosque, justo al árbol viejo que no volverá a florecer jamás.

     Entonces esperé. No supe cuanto tiempo lo hice, aunque el frío parecía buscar abrigo en mí. Entonces surgió, una sombra que había estado ahí todo el tiempo. Una sombra que de pronto creció más allá de mi cabeza. Solo pude pensar que el hijueputa era gigántesco. No suelo usar malas palabras, pero fue lo que se me vino a la mente. Habíamos oído hablar de él, nos habían dicho que era negro y grande, pero no cuanto lo era. Y en ese momento, ni siquiera tenía las alas desplegadas.

     Al principio creí haber escuchado un gorjeo y un graznido, que luego se transformaron en una voz grave, profunda, que parecía venir de todas partes y de ninguna. Pensé que buscaba impresionarme, aunque no tenía mucho sentido, simplemente era impresionante. Luego, el sentido de la maravilla se pasmó. Recordé nuestras conversaciones en la orden, el sentido que para nosotros tendría su muerte.

-   Tienes algo que me interesa-, dijo el Hijo de Nut.

Saqué mi cuchillo, entonces, yo sabía a que había venido.

                             Andor Graut

domingo, 27 de febrero de 2022

LA VELA

 

LA VELA

     Heredada de quién sabe que tía o abuela, la vela rosa siempre estuvo ahí.

     No era un objeto especialmente interesante, pero sobrevivió a la embestida de sus hermanos, a la caída de los jarrones y al golpeteo constante de los balones. Cuando murieron sus padres y la casa al fin fue vendida, por obra y gracia de quién sabe qué espíritu, junto a muebles, una replica de una espada de la guerra civil y algunas prendas de cama, la vela fue a ocupar un lugar en la mesa de centro.

     Fue la primera de muchas porque su presencia fue interpretada como una señal precisa. Ya sabemos que le gusta a Julia; ya sabemos qué podemos regalarle de Navidad, cumpleaños, matrimonio, aniversario.

     Nunca se encendió, por supuesto. Todas las demás fueron utilizadas en cenas románticas o en el día de las velitas o para enfrentar un apagón. Y así fueron pasando los años y la vida hasta el momento en que llegó a su fin. Así, mientras estaba en cama, rodeada de sus amados, exhalando su último suspiro, la vela se encendió a la vista de nadie, refulgió con un misterioso resplandor, hasta que uno de sus nietos pasó por ahí y la apagó.

sábado, 26 de febrero de 2022

AXZNEL VIII

 


AXZNEL VIII

     El Tarmadón me llegó en una caja con otros libros. De hecho, mientras los otros estaban de canto, este venía sobrepuesto a los demás. Se trataba de un pequeño volumen en cuero que no destacaba entre los grimorios y bestiarios que se empezaban a acumular. De hecho, se quedó por algún tiempo olvidado mientras yo estaba embelesado con el Vermiss Mysteriis, hasta que en algún momento el café hizo de las suyas y me vi obligado a tirar de un manotazo todo lo que estaba sobra la mesa. El Tarmadón voló junto a cuchillas, mapas, intentos de pentagramas, y por un momento, al abrirse, hubo un destello, una fuerte de fogonazo, que iluminó como un relámpago la habitación y me lanzó de culo al suelo.

     No sé cómo tal reserva de poder se había escapado de mi radar. No es que quiera decir que yo supiera muy bien lo que hacía, sino que el libro producía un efecto similar al de esas esferas de plasma sobre las que aplicas tu mano y te hace erizar todo el cuerpo. Al abrirlo, sin embargo, se producía una sensación de desencanto, parecía tan atractivo como una enciclopedia. No había diagramas ni letras capitulares; incluso era difícil en algunas partes seguir la lectura porque las palabras estaban juntas. Recuerdo haber leído algo sobre Tzad-Alt-Buld y Armún, y luego tuve que atender una llamada y al regresar y abrir de nuevo el libro encontré que estaba en otro idioma y los caracteres estaban trazados en una tinta rojiza y oxidada que recordaba por momentos el orín del fierro y, por otro, la sangre. En algunas ocasiones pude sentirlo palpitar, en tanto puedo jurar que alguna vez escuché una voz salir de sus páginas. Con todo, no podía soltarlo; no lograba hilar dos ideas juntas, pero no podía soltarlo.

domingo, 20 de febrero de 2022

GUERRERO

 


GUERRERO

Habiendo sometido finalmente al gran dragón, el guerrero encontró que su vida carecía de sentido. Había dedicado los largos años al enfrentamiento decisivo, se había perfeccionado en las técnicas de lucha más difíciles de su época, y ahora, solo doce minutos después, su némesis yacía ante él. El guerrero no supo qué hacer.

     Oyó entonces que alguien tocaba la puerta del templo. Al abrirla encontró a alguien que venía a vencer al dragón; alguien que había dedicado toda su vida perfeccionando las técnicas de la lucha más difíciles de su época. El guerrero se disculpó explicándole lo que acababa de suceder, y la desazón que sentía. La idea de convertirse en el dragón se les pasó a ambos por un momento en la cabeza, pero les sonó falsa, vacía.

     Ambos bajaron la Escalera de los Mil Dolores, mientras conversaban acerca de su vida y dolores. En el camino encontraron a una anciana que venía a desafiar al dragón, le explicaron lo sucedido. La anciana bajó con ellos. Encontraron muchos más aspirantes a matar al dragón en el camino.   

     Al llegar abajo encontraron que eran muchos y ninguno tenía ya un destino. El guerrero sonrió. Al fin había entendido.

-   ¿Alguien tiene hambre? – preguntó. Recordó que hacía mucho tiempo su madre le había enseñado a hacer pan.

Ese fue el comienzo de todo.

sábado, 19 de febrero de 2022

AXZNEL VII

 


AXZNEL VII

     Yo me dediqué a los saberes prohibidos. En mi condición de viajante podía llegar a muchas bibliotecas y librerías para conocer todo tipo de magia. Alguna divertida otra prohibida, pero toda consistía en esforzarse, en medir sustancias, en aprender canticos, letanías, oraciones, en preparar objetos, aprender algo de herrería y un poco de floristería. Bueno, la verdad, lo del ikebana fue solo una excusa para hacerle algunos arreglos bonitos a mi mujer.

     Poco a poco mi estatus dentro del grupo fue subiendo.

     Los años fueron pasando. La vida era buena.

     Como grupo comenzamos a mostrar un dominio más marcado. Echamos a los cazadores más revoltosos, tuvimos el apoyo de la gente. El hermano Alonso se convirtió en el político del pueblo. La gente nos referenciaba y nos quería. A mi solían verme con algo de suspicacia, sobre todo cuando en las noches algún ruido escapaba del sótano. Un ruido o partes de tenáculos o tenazas.

     Construíamos algo que jamás pensamos que podríamos construir, siquiera concebir, pero no olvidábamos nuestro objetivo. O podíamos olvidar que todo esto solo podía tener sentido si nos enfrentábamos a Axznel. Entonces encontré El Tarmadón; entonces Axznel vino a nosotros.

domingo, 13 de febrero de 2022

MUTACIÓN

 


MUTACIÓN

La mutación comenzó lenta alrededor de sus treinta y siente años. En algún momento apareció una pequeña escama verde en su pantorrilla. Su novia, encantada, pensó que se había puesto una joya y le pareció muy cool e interesante, un signo de juventud y rebelión que no esperaba en el contable. Él, simplemente, se acostumbró. Los médicos no pudieron decir nada. Sin embargo, poco a poco los cambios siguieron sucediendo. Su nariz se fue achatando, su lengua alargando, su pelo cayendo. A los setenta años comenzó a andar en cuatro patas y a palparlo con su lengua viperina.

Cuando murió su esposa, por allá a los noventa años, exhalo su primera bocanada de fuego, incineró la casa por completo y alzó el vuelo.

 

sábado, 12 de febrero de 2022

AXZNEL VI

 


AXZNEL VI

 

     Primero pasaron los días y luego las semanas sin saber nada de Jason y los suyos. Después del primer mes asumimos que habíamos perdido nuestro dinero. Sabíamos que podía pasar; es decir, negociamos con criminales. Entonces empezaron los ajustes de cuentas al crearse un vacío en el poder y comenzamos a dudar. Si bien la suma que entregamos era considerable, Jason y los suyos no dejarían sus dominios por tan poco.

     El hermano Carlos vio una noche a un miembro del grupo de Jason mendigando en las calles. Le faltaban las piernas y un ojo. Se arrastraba como bien podía obre un carrito de balineras. Cuando el hermano Carlos se le acercó lo escupió y luego le largo una parrafada que no pudo entender.

     Fue lo último que supimos de ellos y de nuestros créditos. Así que lo dejamos por un tiempo. Había cuentas que pagar, niños que criar; algunos incluso debieron empezar de cero. Estábamos vivos, era lo que nos importaba. Pero Axznel seguía por ahí, y ese conocimiento no nos abandonaba. Así que sucedió lo que debía suceder, y comenzamos a reunirnos de nuevo y a considerar posibilidades. El hermano Alberto comenzó a hacer ejercicio, y el hermano Fernando se aficionó a las armas; mientras el hermano Alonso bajaba a los bares y escuchaba rumores y se hacía amigos de cazadores. Nada de esto sucedió de una manera coordinada, pero sí conjunta. Comenzamos a funcionar como un solo organismo con un único objetivo, aunque no fuera consciente de ello.  Nadie lo traía a colación en las conversaciones, pero comenzamos a vivir solo para ello.

domingo, 6 de febrero de 2022

PELUCHES

 


PELUCHES

Los muñecos de peluche comenzaron a convertirse en un problema. En algún momento eran tres con personalidades bien definidas y funciones claras. Sin embargo, pronto empezaron a aparecer muñecos de todas clases, colores y materiales.  Lo que le sorprendía es que conocía el origen de los tres primeros, pero los demás simplemente fueron apareciendo según sus nuevas necesidades e intereses.

Cuando comenzó a asustarse, también comenzó a venderlos o a regalarlos. Pronto, sin embargo, fueron superponiéndose a los libros. No había ya un sitio de la casa donde no encontrará un bendito muñeco de peluche. En la sala, en la cocina, debajo de la cama, en el baño. Incluso una vez al subir al ático sintió veloces pies de peluche que huían.

Perdió amigos, novia y hasta a su psiquiatra.

Pronto dejaron de verlo. Una novia, que juraba que le había robado todos los juguetes de la infancia, fue a verlo una mañana de septiembre para insistirle por última vez que le devolviera su rana René, porque era el único recuerdo de su madre recién fallecida. Lo encontró debajo de una enorme pila de muñecos; su cuerpo parcialmente devorado. 

sábado, 5 de febrero de 2022

AXZNEL V

 

AXZNEL V

La opción más fácil siempre fue darles el trabajo a otros.  El color de Axznel era un aliciente perfecto. Aunque los gifty son de diferentes razas, el origen del color de Axznel es más místico, de hecho, divino, y eso crea ciertas contradicciones en los cazadores, pues es sabido que ellos adoran a Nut, pues siempre ha hecho fácil su trabajo. Ninguno quería entrar en conflicto con su deidad. Hacía falta un tipo muy especial de hijo de perra para aceptar el encargo. Por suerte para nosotros, en todos los gremios abundan los hijos de perra.

Se llamaba Jason. En su comportamiento y actitud, tanto él como su banda, no se diferenciaba mucho de otros cazadores. La diferencia estribaba en que Jason era especialmente cruel. Se decía que gustaba de destazar a los gifty vivos solo para oír sus gritos; se decía que tenía un criadero de giftys; que él mismo había engendrado un par de mestizos de los que luego se deshizo en aceite hirviendo; se decía que no tenía una verga sino una serpiente. Tratar con él, sin embargo, era fácil. No era un individuo de malas palabras. De hecho, era bastante cortés y, según nuestras referencias, era eficiente. No le dimos largas al asunto. Le encargamos la piel y las alas de Axznel. Le dijimos que queríamos una piel negra. Negra del color de la noche. Solo se rio entre dientes, con esa forma suya tan particular de reírse, que sonaba como arena al derramarse sobre lava. Le dimos la mitad de los créditos al hacer el encargo. La otra se la daríamos al obtener lo nuestro. Eso dijo el hermano Luis que había sucedido.

Por supuesto no se trataba de un encargo fácil, y nos vimos en grandes dificultades para obtener los créditos que le entregamos a Jason y los suyos. Varias de nuestras casas resultaron hipotecadas –la mía por segunda vez-, pero consideramos que se trataba de un asunto menor.  Alex tuvo que vender su auto, y el seguro educativo de los niños de Andrea se esfumó, pero consideramos que se trataba de una buena apuesta, de una apuesta fija.

No sabíamos nada del hijo de Nut.


sábado, 29 de enero de 2022

AXZNEL IV

 


AXZNEL IV

Así que, si no has leído los eventos anteriores, los resumiré aquí:

1. Axznel fue adoptado por Nut en su orfandad.

2. Axznel es una de las siete señales que presagian la llegada de Araiom.

3. La llegada de Araiom índica que Eyanael puede despertar en cualquier momento.

Si has leído hasta aquí, de seguro estarás de acuerdo en buscar preservar nuestra existencia hasta las últimas consecuencias. No sé tú, mi vida tal vez no sea la mejor, sé que nunca podré viajar a una de las colonias marcianas, por ejemplo; que no podré tener a la pelirroja a quien siempre miro de reojo en el trabajo; pero me gusta mi vida, me gusta estar con mis amigos en el bar de los viernes, y lo último que quiero es que eso deje de ser. No me malinterpretes, sé que el mundo es una mierda, que no tiene ninguna solución, que somos muchos en estos pocos metros cuadrados, pero al momento me la estoy pasando bien, y si Eyanael despierta y el sueño se acabe, espero que sea cuando haya cumplido mi labor en la oniria. Al menos eso es lo que he conversado con algunos de los otros adeptos y nuestro diacono.

  Mi labor es simple, es guardar la memoria de estos hechos. ¿Cuáles hechos?, te preguntarás, pues hasta ahora solo he barruntado un poco acerca del nacimiento de Axznel. Pues bien, solo te lo he contado para que sepas cual es nuestra pequeña misión, la misión que documento, la que lleva necesariamente a la muerte de Axznel.

No, no te equivoques. No es un caso de especismo, no somos cazadores. Verás, es que nos gusta demasiado la vida.                

domingo, 23 de enero de 2022

REMORDIMIENTO

 


REMORDIMIENTO

Despertó en la madrugada sabiéndose culpable. Había matado un hombre. Sus manos aún parecían estar manchadas de sangre y se las había lavado ya unas cien veces. Sin embargo, no era eso lo que le importaba. Sus manos se habían untado de sangre muchas veces con anterioridad. Lo que en verdad le pesaba en la conciencia era haberle mentido. Sí, era su aniversario; sí, iban a estar todos sus familiares. Su suegro no había podido venir. Suspiró. Su suegro nunca iba a volver, estaba enterrado en el jardín.

     A veces se planteaba dejar su oficio.

sábado, 22 de enero de 2022

AXZNEL III

 

AXZNEL III

“Por supuesto te hablan del bien y del mal. Por supuesto te han hablado de la perpetuación de la especie. Por supuesto, te enseñaron a venerar a los guardianes porque ellos cuidan a aquellos que han despertado. No te han explicado otra cosa, la más importante de todas. Si los guardianes vences, aquello que consideras cierto y verdadero, aquello que consideras real desaparecerá, pues el objetivo de los arist y de los guardianes no es otro que despertar a Eyanael.

Sé que siete son los signos del advenimiento de Araiom. Usé que uno de ellos era el nacimiento de Axznel. Sé que Araiom despertó a muy temprana edad y poco más. Pero ambas cosas, significan bien o mal, que le mundo se acabará, que la realidad misma se va a acabar. Eso no es malo para los Arist, pero para quienes somos como tu y yo, meros sueños en la mente de Eyanael...

Si te preguntas sobre Araiom, sé muy poco. El Tarmadón reza que es hijo de Armún, aquel que se negó a gobernar Tzad-Alt-Buld, la Ciudad de los sueños, la Ciudad que Sueña o la Ciudad Soñada, porque consideraba que coartaba su propia libertad. En aquel tiempo Araiom era joven y se apresuró a tomar el lugar de su padre. Ten claro, que esta historia pertenece a la realidad y no a la sombra. Aquella aceptación sellaría su destino pues lo consagraría a mantener la realidad en su lugar. Sin embargo, pronto hubo duda en el corazón de otro que era caro al creador, Eyanael.

No te rías, sé esto y lo puedo contar, pues Axznel me lo ha contado a mí. Te lo cuento porque el tiempo de la tribulación está llegando, porque los guardianes y los arist y los despiertos están viendo como los signos confluyen y cómo se acerca el tiempo de Araiom, el tiempo del despertar que teme el mismo Eyanael. Pregúntate en este momento si eres real o un mero simulacro”.     

Por supuesto, lo echaron a patadas del bar antes de que pudiera decir otra palabra.

domingo, 16 de enero de 2022

VENGANZA

 


VENGANZA

Había sido su primer amor y él lo sabía.  Eso quería decir que todo lo había realizado con sangre fría, sin importarle un ápice.

Siendo sinceros lo de los cuernos no le importó. Tarde o temprano le crecerían por una u otra razón. Lo que en verdad le molestó es cuando comenzó a salir con sus amigas. Que Rosalba un día, que Lola el otro, que Flora los viernes. Luego vinieron lo de las risitas a sus espaldas, y ella no estaba para consentir eso. Lo peor es que no podía culparlas (a él sí, él podía elegir), era el único macho que todas conocían. Pero los años pasaron y ella era paciente.

Llegó el momento en que el ya no pudo cubrirlas a todas y pronto le encontraron reemplazo. Ella ya no era una ternerita inocente, y se dio cuenta que el tiempo también le había pasado factura. Así que decidió ponerse gorda y bonita para ver que tan ciertas eran las leyendas, para escapar del juego, así que se la llevaron a un lugar extraño, un lugar de ensueño, al que llamaban matadero.

                                      Andor Graut

 

 

 

 

 

sábado, 15 de enero de 2022

AXZNEL II

 


AXZNEL II

 

     Nut, la Señora de los enigmas y misterios, la solitaria eterna, la temida por los dioses. Nut, la que socorría en silencio, había deseado a través de las eras la posibilidad de tener un hijo. La incorruptible había deseado una vida para custodiar, una vida por la que temer, una esperanza propia.

     No podía salvar a Sal, pues su destino estaba ya escrito, pero sí escuchó su suplica, así que acogió al recién nacido entre sus brazos. El cambio fue inmediato, la piel y los plumones claros se mudaron a negro de manera tal que el niño pareció haber desaparecido de la faz de la tierra para convertirse en una silueta que fue cuidada desde entonces.

     El niño fue llamado Axznel. Lo que traduce, palabras más, palabras menos, al menos en las lenguas del sur, Hijo de la noche, en tanto en el norte se le reconoce como Hijo del misterio. Sabemos pocas cosas de su niñez, excepto que fue dura y exigida y que, en ella, dentro de lo posible para un custodiados por los dioses, Axznel despertó.

     Los misterios son confusos al respecto. Los dioses son parte del sueño de Eyanael, pero al ser dioses podrían pertenecer al mundo de la vigilia. Algunas corrientes afirman que los dioses son conscientes de ser un simulacro, pero que algunos de ellos son reflejos del mundo de la vigilia. No sabemos si Nut era consciente de su condición de simulacro, si podemos saber que Axznel despertó y que fue temido por Eyanael, pues no solo era un gifty que se convertía en Guardián, sino que además había aprendido de su madre los misterios que solo le habían pertenecido a ella.

     Sabemos, ahora, además otra cosa. El nacimiento de Axznel era uno de los siete signos de Araiom y eso significaba que el fin del sueño se aproximaba.

                                 Andor Graut

sábado, 8 de enero de 2022

AXZNEL I

 


AXZNEL

Volvía a Taz-Nel después de muchos años cuando fue avistada por cazadores. Eran cazadores jóvenes, inexpertos, casi niños, que no conocían los ritos ni los protocolos; que no conocían las reglas ni el valor de las fronteras. Lo único que tenían era la sed de sangre; de resto, eran casi unos salvajes. Sin embargo, ella era inocente. Siempre había sido inocente la pequeña Sal. Así que ocurrió lo del cuento, ¡lo recuerdas? Aquel de una niña con una caperuza roja que cruza por el bosque y es devorada por un lobo. Sal era la niña, los lobos los cazadores. No hubo leñador, por supuesto, porque aquí están las diferencias: Sal iba a ser madre y la choza de la abuela había sido derruida por los bombardeos del 73, de manera tal que solo quedaba en pie una esquina sin ningún techo. Ahí fue acorralada Sal, cuando no le quedaban fuerzas para volar, correr o arrastrarse, sabes lo indefensas que son las gifty cuando van a dar a luz.

La primera cuchillada la cogió de sorpresa, como si de repente se diera cuenta que en realidad no era un juego; la segunda le trajo la desesperación, nadie sabía de su pequeño hijo, ni siquiera había suido presentado a Narya en la noche azul; la tercera solo supo a desesperación y una melancolía infinita; la cuarta no la sintió, ni la quinta ni la sexta ni la décimo octava. Los chicos mutilaron sus alas y la dejaron tirada cuando se acercaba la hora bruja y algunas gotas comenzaron a caer.

Eran jóvenes. No conocían los ritos ni los protocolos ni sabían nada de los ciclos de vida. No notaron la suavidad de las plumas de Sal, ni la brillantez del color de sus plumas, así que no se percataron tampoco de la vida que había en ella. No notaron que poco después que el aliento había abandonado a Sal, aún había movimientos en su bajo vientre. Se hubiera necesitado mucha experiencia para darse cuenta de ello.

La criatura, blanca, tierna, con unos pocos plumones alrededor de su rostro y talones, lloró ante la vida y su melancolía. Cualquiera hubiese pensado que estaba resignado a brillar por pocas horas y luego extinguirse. Imagina por un momento la escena: una pared sobre la que se asentaba el cuerpo de una gifty debajo de la cual se arrastraba una criatura condenada, como cientos, como miles alrededor de la faz de la tierra, y sobre ellos, limpiando todo, la lluvia.

Era negra la noche. Sin luna. Dicen que Nut siempre había querido un hijo.                  

 

domingo, 2 de enero de 2022

DICE EL VIAJERO DEL TIEMPO...

 




DICE EL VIAJERO DEL TIEMPO

Dice el viajero del tiempo que el año de la Comadreja zombi fue el del alzamiento de los insectos. Todos los enjambres y colonias se alzaron, se alzarán como un solo organismo y someterán toda la civilización humana. Sin embargo, dice el viajero del tiempo, que es un cambio para bien, pues al fin se llegó a la paz mundial y se han tomado por asalto las estrellas. Yo escucho al viajero del tiempo mientras nos tomamos un café, y por si las moscas, las abejas o las libélulas, doy amablemente un poco de azúcar a una hormiga que veo pérdida por ahí.