miércoles, 5 de marzo de 2008

NO AL USO DE LOS CLÁSICOS DENTRO DE LOS COLEGIOS


Hace poco tiempo hable con un amigo que trabaja como distribuidor de libros para el Plan Lector en esta Tierra de Muertos. Lo encontré cabizbajo y taciturno, cosa que en él no es normal, y me contó que no había conseguido un solo cliente este año lo cual me sorprendió.
La razón de mi sorpresa estriba en que la editorial (me reservo el nombre) para la que él trabaja es una de las más revolucionarias y con mayor clientela en el sector infantil y juvenil.
Más aumento mi sorpresa cuando escuche que las disculpas de los profesores radicaba en que no ofrecía los clásicos. Es decir entre los títulos ofrecidos no se hallaban: “Romeo y Julieta”, “La Celestina”, “La Mala Hora”, “Por Todos los Dioses”, “Cuentos Completos de los Hermanos Grimm”, “Corazón, Diarío de un Niño”, “Cali Calabozo” (de ese autorzuelo ya hablé en una ocasión anterior) “El Principito”, “Don Quijote de la Mancha” o “Madame Bovary”. Incluso protestaron porque no aparecía nombres rutilantes como Tolstoi o Dostoviewsky. No miranron en cambio que aparecían autores como Anthony Browne, Ian Falconer, Lemony Snicket, Roald Dahl, Gianni Rodari, Yolanda reyes, José María de Vasconcelos, Rafael Chaparro Madiedo, Ana María Machado, Stephen King y Ana María Machado, Entre otros.
Lo curioso del caso es que los profesores al no pedir otros libros lo que hacen es mantener el Status Quo y reproducir los modelos establecidos sin aportar para un verdadero libre desarrollo de ideas y personalidades. Y la razón porque lo hacen es brutalmente simple, los profesores no leen. No están enterados de los avances de la literatura contemporánea y se tragan el cuento de que los niños de hoy son como eran ellos.
Uno de los argumentos que respaldan mi posición se halla en que los maestros siguen pidiendo “Romeo y Julieta” y “Hamlet” cuando “A vuestro gusto –As You Like It-“ o “Titus Andronicus” serían más afines a los jóvenes de hoy. No las recomiendan porque no las conocen, jamás las han leído.
Los niños de hoy disfrutan más “Érase una vez el amor pero tuve que matarlo” Y “Sin tetas no hay paraíso”. Pero en lugar de aprovechar estos libros para motivarlos en la lectura resulta que estos libros son prohibidos en los colegios. Se conoció el caso en Kalí de una profesora expulsada de un colegio porque había leído “Sin tetas no hay paraíso” con sus alumnos.
No sólo los maestros, sino todos en general, deberíamos aprender un poco del fenómeno acaecido con el detestable Harry Potter.
Hay que leer señores maestros, hay que leer.
P.D. Una cosa más queridos docentes:
Internet no es una competencia para el desarrollo lector de ninguna persona. Al contrario como ya ha demostrado Inglaterra, puede ser uno de los más poderosos aliados cuando se usa con una buena cabeza.
P.D.2.
Reto a cualquier maestro que me diga que sabía que “La Abeja Maya” y “Winnie the Pooh”, caracteres apropiados por Disney, fueron originalmente libros.
P.D.3.
La mayoría de estos nuevos autores los conozco gracias a la paciencia infinita de Isabel para explicarme que la literatura infantil y juvenil no es un bodrio ni es basura.
Así que una vez más: ¡Gracias amor mío!

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Es increíble como puede enternderte. Este ejercicio del blog te está haciendo mucho bien... pero no te enojes... no solo estoy entendiendote, sino disfurtando del tono con el que lo haces y los temas que escoges!!!!

un abrazo
silvia