miércoles, 14 de julio de 2021

UNO DE FANTASMAS

 


UNO DE FANTASMAS

 

Se retaron el uno al otro a entrar a la medianoche. Ninguno de los dos creía a ciencia cierta, pero tampoco descreía del todo. Al fin y al cabo, se trataba de una casa encantada.

La reja de entrada chirrió cuando debía chirriar, y la luna llena pintó de claroscuro su camino. No lo pudieron evitar y se agarraron fuertemente de las manos mientras se dirigían a la entrada principal. El viento aullaba entre los árboles.

-   ¿Qué sucedió aquí? –, preguntó él.

-   Lo de siempre -, respondió ella -. No lo supieron manejar. No soportaron lo que ellos mismos habían creado y terminaron por morir. Hay quienes dicen que fue por su propia mano. Hay quienes dicen que se mataron entre ellos. Hay quienes dicen que su propia creación les ayudó.   

Él entró de primero. Ella lo siguió pensando, no por primera vez, si era mejor echarse para atrás. No pudo evitar arrimarse más a él cuando un viento frío levantó su vestido. La luz dibujó por un momento la silueta de una mujer que lloraba frente a ellos. No sintieron miedo, solo una extraña piedad.

Subieron las escaleras que crujió donde debía crujir y se calló donde debía callar. Afuera comenzó a llover.

-   Eran los últimos. Solo una madre y su hijo -, dijo él. Y luego -, fue todo lo que quedó de ellos.

Desde la ventana del segundo piso ambos pudieron ver alrededor. Un bosque raquítico y la tierra yerma hasta la piedra misma era el paisaje monótono que los rodeaba. La casa era la última que se había mantenido en pie en el planeta.

X504 le dio la mano a B612. No necesitó hacer nada más. Salieron de ahí sin mirar atrás. Se prometieron nunca volver al planeta Tierra.

 

                                 Andor Graut

 

 

0 comentarios: